1- Entrenamiento de la cuchara
Para realizarlo, debes tomar una cuchara limpia y ubicar el mango en tus labios con fuerza para que no se te caiga. Luego, sonríe, la cuchara deberá elevarse por el movimiento. Mantén la cuchara elevada durante diez segundos, descansa cinco más y repite el movimiento nueve veces.
2- Al Gua Sha y a los rodillos faciales hazlos parte de tu rutina
El Gua Sha y los rodillos faciales están hechos de jade o de cuarzo, el primero es una piedra plana, mientras que el segundo, como bien lo dice su nombre, es un rodillo. La función de ambos es hacer masajes en el rostro de manera ascendente; de esta manera, se estimula la circulación de la sangre, se drena la inflamación y las toxinas, esto con el fin de tonificar y esculpir el rostro.
Consejo: Aplica tu crema o suero antes de realizar tus masajes para que se deslice mejor la herramienta y tus productos penetren mejor en tu piel.
3- Incluye antioxidantes a tu rutina
Los antioxidantes protegen a tu piel de la contaminación del ambiente y de los daños solares, así que es indispensable que empieces a implementar cremas o sueros que contengan antioxidantes para que, junto con el protector solar, mantengan tu piel firme y jugosa.
Asimismo, incluye alimentos antioxidantes (zanahorias, tomates rojos, espinacas, calabaza, papaya, uvas, calabacines, maíz, pimientos, naranjas o aguacate) en tu dieta para que, en conjunto, eviten que el fotoenvejecimiento cause flacidez y otros problemas en tu piel.
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