Cuando todos probaron esta cazuela, no pudieron parar de comerla.

Preparación de la pasta: Cocine la pasta según las instrucciones del paquete hasta que esté al dente. Escurra y reserve.

Preparación de la salsa: Derretir la mantequilla en una cacerola grande a fuego medio, agregar la harina y revolver durante 1 o 2 minutos hasta que adquiera un tono dorado claro. Incorporar la leche gradualmente y batir, sin dejar de revolver hasta que la salsa espese. Retirar del fuego e incorporar la crema agria, la mostaza de Dijon y el ajo en polvo.

Precalentamiento del horno: Configure el horno a 375 °F (190 °C).

Colocación de la cazuela en capas: en una fuente para horno de 23 x 33 cm, crea la primera capa con la mitad de la pasta, el chucrut, la salchicha polaca y la mitad del queso suizo. Vierte y esparce con cuidado la mitad de la salsa preparada sobre esta capa.

Repetir: Continúe colocando capas con el resto de la pasta, el chucrut, la salchicha, el queso y la salsa.

Hornee a la perfección: coloque la cacerola en el horno precalentado y déjela hornear durante 30 minutos, o hasta que el queso se transforme en una obra maestra derretida y burbujeante.

Sirva y disfrute: deje que la cazuela se enfríe un poco antes de servir. ¡Sumerja la cazuela de pasta polaca en esta deliciosa y disfrute!

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