Para prepararlos, cubra suavemente las pechugas y los muslos de pollo con aceite. Condimente con un poco de sal marina, pimienta negra machacada y cebolla granulada.
Próximo paso:
Colocar en una fuente para horno y cubrir con papel aluminio. Después de 25 a 30 minutos en el horno a 350 grados Fahrenheit, o cuando la parte más gruesa de la pechuga registre una temperatura interna de 165 grados, retirar del horno.
Tercer paso:
Se requieren diez minutos de enfriamiento antes de colocar el pollo en el refrigerador durante una hora. Una vez que el pollo se haya enfriado, corte las pechugas y los muslos en trozos de un cuarto de pulgada de largo por media pulgada de ancho. Mezcle bien el apio, la mayonesa y el pollo picado en un tazón grande.
Cuarto paso:
Después de haber revuelto bien todo, tapa y deja enfriar durante al menos una o dos horas, o quizás durante toda la noche, para garantizar que los sabores se desarrollen. La ensalada de pollo estará en su mejor momento al día siguiente, después de que los sabores hayan tenido la oportunidad de mezclarse.
Quinto paso:
Añade más sal y pimienta a tu gusto mientras ajustas el condimento. ¡Espero que lo disfrutes!
