El aroma de manzana y canela que llena suavemente la cocina es una clara indicación de que el pan de manzana Amish se está horneando en el horno, un pan que habla tanto al corazón como al paladar con su encanto reconfortante y hogareño. Este pan es un homenaje a la tradición Amish de adoptar ingredientes naturales y técnicas de cocina sencillas, una práctica arraigada en la herencia de los colonos holandeses y alemanes en Pensilvania. Los buñuelos de manzana y sus variaciones han sido durante mucho tiempo una piedra angular de la cocina tradicional Amish y de la cocina rural estadounidense, ofreciendo una porción de comodidad con cada bocado. Ya sea que se disfrute como un comienzo cálido del día o como un dulce agregado al té de la tarde, la deliciosa combinación de manzanas suaves, especias cálidas y miga tierna de este pan lo hace irresistiblemente atractivo.
Para quienes deseen realzar este manjar rústico, una cucharada de crema batida fresca o una bola de helado de vainilla pueden transformarlo en un postre decadente. Alternativamente, para un desayuno o un brunch, combinarlo con café negro fuerte o leche helada complementa su dulzura, mientras que el tocino crocante o las salchichas sabrosas pueden ofrecer un sabor deliciosamente contrastante.
Receta de pan de manzana frito Amish
Ingredientes:
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1/3 taza de azúcar morena clara
2 cucharaditas de canela molida
2 manzanas grandes, peladas, sin corazón y cortadas en cubitos
2/3 taza de azúcar blanca
1/2 taza de mantequilla sin sal, ablandada
2 huevos, a temperatura ambiente
1 1/2 cucharadita de extracto de vainilla
1 1/2 tazas de harina común
1 3/4 cucharaditas de polvo para hornear
1/2 taza de leche
Para el glaseado:
1/2 taza de azúcar en polvo
2-3 cucharadas de leche o crema
Direcciones:
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