¡Examinemos el proceso!
Así es como creo mi vinagre de sidra de manzana.
Es evidente que el vinagre de manzana contiene bacterias buenas para los intestinos, por lo que se convierte en un alimento que detecta cuando estás lleno y suprime el apetito. Además, los minerales que produce el hierro, el magnesio y el fósforo favorecen los procesos metabólicos saludables al acelerar la descomposición y excreción de los lípidos que se ingieren a través de la dieta. Por ello, se considera un adelgazante natural y casi no tiene efectos negativos, salvo una pequeña elevación del pH, que es ácido. Si tienes úlceras o gastritis, evita tomarlo; de lo contrario, no dudes en incluirlo en tu dieta habitual. Complementa nuestros platos y es lo suficientemente sutil como para ser un condimento sabroso.
Es fácil de preparar en casa, pero es necesario un consejo. Utilice únicamente manzanas que sean orgánicas y cultivadas localmente. Para que fermenten correctamente deben estar totalmente libres de pesticidas. Como era de esperar, este plato es en realidad el resultado de la fermentación, que se acelera gracias a la autenticidad y la mayor madurez de los frutos.
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